Desde el 14 de marzo, los huertos urbanos junto con todos los parques y jardines de la ciudad cerraron sus puertas como medidas de distanciamiento social impuestas para frenar la pandemia del Covid-19. Así , el Huerto Comunitario de Manoteras, desde entonces, ha cumplido esta consigna y solo ha mantenido una asistencia mínima con dos personas que se han encargado de vigilar el riego automático y el invernadero.
Tras más de un mes de confinamiento, y avanzada la primavera con sus lluvias, el huerto ha seguido dando vida en forma de vegetales. Habas, lechugas, acelgas, repollos llegaban a su punto de madurez y los huertanos veían con preocupación que se pudiera perder esta cosecha urbana. En este escenario, una reflexión fue tomando cuerpo. A pesar de que los huertos urbanos son espacios más relacionales que productivos o de autoconsumo, se producen decenas de kilos de productos frescos, ecológicos, de proximidad, cultivados en los barrios de nuestra ciudad, que pueden ayudar a un buen número de personas en situación de vulnerabilidad.
Así nace la iniciativa de cosechas solidarias y el Huerto comunitario de Manoteras, junto con otros huertos de Retiro, Barajas, Lavapìés, Moratalaz, Alameda de Osuna, Vicálvaro .....y más¡ se han sumado a ella y han contribuido con sus verduras bien frescas recién cogidas por dos personas designadas para ello.
Hasta el levantamiento del confinamiento, no podremos ver de nuevo a los hortelanos trabajando la tierra en los huertos urbanos, pero el destino de la cosecha recogida les permite poner su granito de arena y aportar un poco de vida en esta tragedia sanitaria y social que ha supuesto la pandemia. Las verduras del Huerto de Manoteras se han donado al Banco de Alimentos, para que desde allí puedan llegar a personas en situación de vulnerabilidad. El traslado de los productos ha sido realizado por la Asociación Dual.