Proyección y coloquio con los directores del documental, Laura Casielles y Jalil Mohamed
Fuente: PÚBLICO 20/09/19
"Un desierto de África", "un lugar de Marruecos", "allí se habla árabe". Pocas personas saben definir qué es el Sáhara Occidental. Muchos se sorprenden, algunos incluso desconfían, cuando se les informa de que ese territorio fue, no hace tanto, la 53ª provincia de España, que allí se hablaba —y algunas personas aún lo hablan— español y que un buen día de 1975, la metrópoli abandonó su colonia y sus habitantes dejando este territorio en manos de Marruecos y convertido en el único país de África que no pudo llevar a cabo el proceso de autodeterminación, independencia y descolonización.
Sobre esta historia olvidada o silenciada pretende arrojar luz el documental Provincia 53, un proyecto de la fundación cultural de Podemos , el Instituto 25-M, subvencionado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), que podrá verse a partir de este viernes.
"El Sáhara Occidental estuvo colonizado por España entre 1884 y 1975, pero rara vez los libros de texto y los medios de comunicación hacen memoria de este tiempo colonial, necesario para lograr la verdad, justicia y reparación que requiere este proceso", explica Laura Casielles, directora del proyecto. "Nos parece que el abandono del Sáhara occidental es uno de lo precios de nuestra Transición y sobre el que se han dejado caer grandes capas de silencio", sostiene.
No se trata de un documental al uso, "no se ve como un película", apuntan los creadores, sino que al entrar en la web (que se activará durante la tarde de este viernes), el espectador encuentra piezas sonoras, de vídeo, texto e imágenes con los que puede ir recomponiendo las piezas de un puzzle que dieron lugar a más de 170.000 refugiados, según ACNUR, tras la ocupación marroquí del territorio. Refugiados con DNI español que ahora habitan en los campos desérticos de Tindouf, Argelia.
"Se pueden ver y escuchar testimonios de saharauis y de españoles que vivieron aquella época y construir así una memoria cruzada poniendo en común ese tiempo que se compartió, aunque las dos miradas tenían situación muy diferente y las consecuencias han sido distintas par ambos", añade Casielles, que incide en que el trabajo deja patente la "responsabilidad de nuestro país en la resolución de un conflicto cuyas consecuencias siguen muy vivas 43 años después".